YOOO!! Como estas?? Soy Guillermina Machin, la creadora, profesora y única integrante de SUSHI MAKER. Sushiwoman, entre otras cosas. Nací y vivo en La Plata, Buenos Aires, Argentina. En el 2011 el sushi comenzó a formar parte de mi vida. Tomé un curso de un mes en el IGA Argentina (Instituto de Gastronomía) solo como un hobby, un pasatiempo y porque me encanta cocinar y agasajar a mi familia y amigos con ricas comidas. Con el paso de los meses se fue convirtiendo en una terapia creativa.
Al principio lo hacía para consumo propio, con sabores tradicionales, pero a medida que ganaba confianza en la técnica del armado, crecía mi imaginaron en combinar sabores de todo tipo. El sushi poco a poco iba ganándose un lugar en vida, dejaron de ser solo las cenas o almuerzos familiares para pasar a elaborar en cumpleaños, para muchas personas y eso hacia cada vez que elaborara, me sintiera más segura, de mí y de mi propia técnica.
Y fue ahí en donde comenzó mi camino...los vídeos de youtube con Iwao, los cursos en CABA (ciudad de Buenos Aires), muy autodidacta.
Hasta que, a los pocos meses, decidí comenzar con mi propio emprendimiento. Sushi delivery elaborado en mi casa. En esa época tenía muy poca competencia, era uno de los pocos delivery de sushi que había en la ciudad en ese momento. Me llenaba de satisfacción ver como poco a poco mi proyecto crecía.
En 2014 decidí montar un local de sushi, Mi sueño estaba cumplido. Fue un GRAN desafío. Fueron cinco años de mucho trabajo.
Año tras año, la energía con la que había empezado, poco a poco se iba apagando. La rutina y tantas responsabilidades empezaban a opacar mi gran amor por el sushi. Por lo que decidí alejarme, para emprender otro camino.
A principios del 2020, mi gran amor por el sushi volvía, Sentía que todo mi conocimiento era necesario expandirlo y animar a otros a que cumplan sus sueños, o que simplemente experimenten el arte de elaborar sushi. y así surgieron las clases presenciales.
Con los meses se sumaron tres ebook y las clases online, lo que me permitió llegar a todo el país, y que muchos de mis alumnos se animaran a vender sus propio sushi.